La memoria es una extraña capacidad que nos permite atrapar y conservar (en forma de recuerdos) el tiempo y el espacio. Es un potencial común a todos los seres vivos, pero en los humanos no sólo se manifiesta en imágenes y sensaciones, sino que, además, se puede expresar a través de palabras de infinita combinatoria. Cuesta imaginar cómo será la memoria de los animales, y más aún, la de los vegetales. Cómo será, por ejemplo, la memoria de las berenjenas, o la de las ovejas; seres gregarios hechos para vegetar y dejarse llevar. Según un estudio de una universidad europea, estos animalitos tienen muy buena memoria y no sólo son capaces de reconocer a las personas felices e inteligentes, sino que prefieren interactuar con ellas.